Los cuartos de baño salvaron a los habitantes de Providencia del feroz huracán IOTA, que arrasó con todo en la Isla
- El conocimiento y la ciencia salvaron vidas: IDEAM
Por Karel
- A la pregunta global de cómo en Providencia pudieron salvarse del violento huracán IOTA que destruyó a la Isla en toda su infraestructura, los pobladores lo atribuyen a Dios, pero además de lo sobrenatural, a su agudeza e instinto de supervivencia.
Por los anuncios de alerta de los meteorólogos, la gente se preparó asegurando techos, sellando ventanas y puertas y refugiándose en albergues o sitios que consideraban seguros.
- Al sentir la poderosa fuerza del huracán destechando y destruyendo casas, que en su mayoría eran de madera, optaron por refugiarse en los baños, las únicas estancias con paredes y techos de concreto, donde permanecieron durante horas, hasta que el rugido del ciclón aminorara.
Cuando salieron de los baños, les parecía que tal vez no habían despertado de un mal sueño o pesadilla. Toda Providencia estaba destrozada. “Bastaba pellizcarse para saber que estábamos vivos, que la gente estaba en pie”; “nos abrazamos, lloramos y hasta reímos”; “fue como ganarle la batalla al IOTA,” decían algunos isleños, plenos de emociones encontradas.
- Pese a la pronta asistencia del Gobierno Nacional, hubo críticas por no evacuar a los habitantes de Providencia, a sabiendas, por advertencias del IDEAM, que las consecuencias del huracán categoría 5 podrían ser devastadoras.
La misma entidad informó a la Prensa que “el conocimiento, la Ciencia y la tecnología permitieron salvar muchas vidas en San Andrés y Providencia, especialmente cuando la información meteorológica de las alertas llega a tiempo.”