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  • Mision de Verificación de la ONU en Colombia
El Secretario General António Guterres visita Llano Grande en Dabeiba (Colombia), donde los excombatientes de las FARC se están reintegrando en la sociedad civil.
23 Noviembre 2021
Paz y seguridad
  • Rodeado por el presidente del país, Iván Duque, y por el antiguo comandante de las FARC-EP, Rodrigo Londoño, el Secretario General de la ONU visita este martes Antioquia, al que describió como “un laboratorio de paz”, para ser testigo de cómo se desarrolla el proceso de reincorporación de los excombatientes a la vida civil y de los retos que quedan por cumplir.

Cinco años después de la firma del Acuerdo de Paz de La Habana, el Secretario General de la ONU ha querido “constatar de primera mano los logros de la paz” en Colombia, pero también los desafíos que aún quedan por delante.

Para ello, António Guterres comenzó su visita al país desplazándose, en primer lugar, hasta Llano Grande, un predio de la municipalidad de Dabeiba, en el departamento de Antioquia.

La elección de esta región para la visita es muy simbólica, pues se trata de uno de los 32 departamentos del país que sufrió de forma más severa los impactos de los 50 años de conflicto. Se estima que hasta el 80% de la población estuvo afectada por el conflicto. De hecho, Guterres considera Antioquia “un laboratorio de paz”.

Llano Grande es un poblado de 150 habitantes, donde conviven antiguos enemigos y víctimas que, ahora, con la ayuda de las Naciones Unidas, del Gobierno y los propios excombatientes y vecinos, se ha convertido en un lugar donde reina la paz, hasta tal punto que a todos ellos les gusta verse como una familia.

Visita en un ambiente espontáneo

Efrain Zapata, excombatiente de las FARC-EP, ahora trabaja en un taller de confección.

Misión de Verificacón de las Naciones Unidas en Colombia/Esteban Vanegas
Efrain Zapata, excombatiente de las FARC-EP, ahora trabaja en un taller de confección.
  • Rodeado por el presidente de Colombia, Iván Duque, y por el antiguo comandante de las FARC-EP, Rodrigo Londoño, antes conocido como “Timochenco” y ahora presidente del partido Comunes, Guterres se paseó por Llano Grande en un ambiente muy espontáneo, en el que pudo conversar de forma distendida con los excombatientes y vecinos del pueblo que se benefician de los proyectos de reincorporación de los primeros.

“Expreso satisfacción por estar en Llano Grande y constato de primera mano los logros de la paz”, dijo António Guterres, que tuvo ocasión de visitar el taller de confecciones del pueblo. Allí conversó, entre otras personas, con Monica Astrid Oquendo, quien recientemente dijo a Noticias ONU que el Acuerdo de Paz ha traído proyectos que han beneficiado mucho a la comunidad.

Con ella y otros trabajadores del taller, el Secretario General pudo hablar tanto sobre las prendas que allí se fabrican como acerca de la importancia de la labor de las mujeres en el liderazgo del proceso de paz.

  • Después, continuó su paseo por Llano Grande y tuvo ocasión de hablar con un grupo de excombatientes que aprovechó la visita del Secretario General para el lanzamiento de “Trópicos”, una marca de café que, según comentó uno de sus creadores, Frey Gustavo de Maté, pertenece a una cooperativa con 1200 asociados.

 

Misión de Verificacón de las Naciones Unidas en Colombia/Esteban Vanegas
Una imagen cotidiana en Llano Grande.

Guterres se interesó especialmente por el cultivo de la planta y los distintos tipos de café que se producen en Colombia, así como por el café que producen en concreto estos excombatientes.

  • “Trópicos es una marca (…) cuya geografía ofrece unas características especiales. La rebeldía de los trópicos hace especial este café. Especial porque viene de comunidad, de personas en reincorporación. Tiene su trasfondo social y aparte tiene sus estándares de calidad. Hemos seleccionado grano a grano para poder una alta calidad y poder ofrecer Trópicos al mundo”, explicó Gustavo de Maté.

Posteriormente, el Secretario General pudo ser informado de otros proyectos que se han puesto en marcha para lograr la reincorporación y la reconciliación, como la escuela del poblado, la fábrica de arepas y la de jabones.

Después, en una breve alocución a la comunidad en la cancha de fútbol del poblado, Guterres felicitó a todos por “su entusiasmo y su dedicación” en estos proyectos, que cuentan con la ayuda del Gobierno y la comunidad internacional, y que avanzan no exentos de dificultades de financiación, por lo que observó que es necesario redoblar los esfuerzos para garantizar su sostenibilidad, así como involucrar al sector privado.

Guterres reconoció también todo el trabajo de la comunidad en el municipio de Dabeiba y en otros municipios cercanos a los que exaltó “como ejemplo de integración y reconciliación por recibir a los excombatientes con los brazos abiertos y normalizar la vida democrática”.

Y añadió: “Esto muestra verdaderas cualidades humanas de colectividad, generosidad, esperanza y coraje para construir un futuro mejor”.

El Secretario General, António Guterres, visita un taller de confección que trabaja con exguerrilleros para su reintegración en la sociedad, en Llano Grande (Colombia).

Misión de Verificacón de las Naciones Unidas en Colombia
El Secretario General, António Guterres, visita un taller de confección que trabaja con exguerrilleros para su reintegración en la sociedad, en Llano Grande (Colombia).

La paz no viene de un día para otro

Tras escuchar a los miembros de la comunidad, Guterres dijo que “ellos saben mejor que nadie que la paz no viene de un día al otro. Cuesta trabajo construirla, cuidarla, sostenerla”.

“Se da una paradoja: el objetivo de la paz es que no haya enemigos en una sociedad, pero desafortunadamente hay enemigos de la paz”, afirmó antes de expresar su solidaridad con las víctimas y sus familias.

Desde el 2017, solo en el departamento de Antioquia se han registrado 30 homicidios y cuatro desapariciones, en su inmensa mayoría de hombres. En toda Colombia, el número de asesinatos se eleva a 303 excombatientes y el de desapariciones a 25, mientras que el de defensores de los derechos humanos y líderes sociales es de 477 personas.

Por ese motivo, Guterres admiró “la tenacidad y el compromiso de los excombatientes”, los líderes sociales y los defensores de los derechos humanos que “siguen apostando por construir la paz en Colombia en el día a día”.

Pero advirtió que “garantizar su seguridad es vital para consolidar la paz”.

La ONU óscar al actor secundario

Con ese objetivo, ofreció “el compromiso de las Naciones Unidas” para respaldar el proceso de paz, y aseguró que tratará con el Gobierno tanto el asunto de la seguridad como el de la vivienda: “Todos vamos a aprovechar esta reunión para mejor trabajar”.

No obstante, Guterres dijo que reconocía “con humildad” que el trabajo de la Organización es secundario y que la labor esencial en la construcción de la paz es de los colombianos: “si esto fuera un filme no seríamos candidatos al óscar al mejor actor, sino al mejor actor secundario”.