El uso de marihuana durante el embarazo produce autismo, agresividad y ansiedad en los niños
- Algunas madres que consumen marihuana durante el embarazo por considerar que alivia las náuseas, darían a luz niños autistas, ansiosos, agresivos, inclusive adictos.
Según Yasmín Hurd investigadora en un estudio calificado sobre el asunto, dio’ a conocer que el consumo del cannabis en estado de gestación, podría provocar cambios genéticos que desarrollarían esas patologías, con efectos a largo plazo en los niños, y podrían tener problemas en la educación y a nivel social.
- Hurd, catedrática de Neurociencias y directora del Instituto de la Adiccio’n de Mount Sunai en New York asegura, que “a partir de los 3 años, los niños tendrían cambios en los niveles hormonales, un aumento en la ansiedad, la agresividad y la hiperactividad.
Pero Hurd advierte, que el estudio no puede probar que la exposición a la marihuana en el útero provoca estos síntomas. Sin embargo, en experimentos con animales, Hurd comentó que han encontrado que el ingrediente activo de la marihuana (el THC) provocaba cambios en el sistema inmunitario de los animales durante el embarazo.
- Durante el experimento Hurd y sus colaboradores dieron seguimiento a más de 300 madres, y observaron la conducta infantil de sus hijos. Los investigadores encontraron que los niños de las madres que habían consumido marihuana durante el embarazo eran más ansiosos, agresivos e hiperactivos, y tenían unos niveles más altos de cortisol, la hormona del estrés, que los niños cuyas madres no utilizaron la droga
Los hijos de las madres que usaron marihuana durante el embarazo también experimentaron cambios en el ritmo cardiaco asociados con una mayor sensibilidad al estrés.
Necesitamos saber qué sucede con estos niños más adelante en la vida”, planteó. “Quizá estén del todo bien, o tal vez necesiten intervenciones que los ayuden a superar algunos de los problemas conductuales que tienen, algo que es realmente crítico”, dijo Hurd.
Este estudio sugiere que usar la marihuana durante el embarazo puede tener consecuencias en el neurodesarrollo a lo largo de la infancia y en los años posteriores de la niñez